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La consulta, que culminará con la elaboración, por primera vez, de un reglamento regulador, reforzará la seguridad jurídica de los prestadores y los destinatarios del servicio y mejorará la definición de los ámbitos de intervención de las diferentes administraciones.
El objetivo es mejorar el abastecimiento de agua, con una gestión flexible y eficiente de los recursos disponibles, teniendo en cuenta las diferentes fuentes (superficiales, acuíferos y desalinización).
Se pretende, por tanto, por primera vez, reflejar, definir y articular el servicio de competencia de la Generalidad de Cataluña, teniendo en cuenta la existencia y gestión de tres tipologías diferentes de infraestructuras de abastecimiento en alta: la primera de ellas hace referencia a unas instalaciones de titularidad del Gobierno catalán y que las explota de manera directa ATL; la segunda tiene relación con otras infraestructuras que están gestionadas por operadores que lo prestan por encargo de la Generalitat de Catalunya (como por ejemplo, las de Taigüer) y, finalmente, unas instalaciones que no son titularidad del Gobierno, pero que están vinculadas a dicho servicio y reversión (como por ejemplo las de Aguas de Barcelona), y que transitoriamente mantienen el régimen de explotación que tuvieran en el momento de declaración del servicio de la Generalitat de Catalunya en 1990.
Fuente: govern.cat/salapremsa